Diciembre siempre ha sido un mes de encuentros y reencuentros. Siempre la excusa es "DESPEDIR EL AÑO", y pasar un lindo momento... pero es realmente placentero???
Desde el 1° de Diciembre, se comienzan a recibir las invitaciones y los mails que dicen... "Che, juntemonos a cenar... que se nos va el 2009"... Y porque??? En el 2010 nadie piensa ingerir alimentos por la noche???
Porque esta corrida de despedirse de la genge que vas a seguir viendo el primer lunes del año próximo?
Y para colmo, ahora esta Facebook. Donde además te llega la invitación de la Salita Amarilla para despedir el año, y como atracción para el evento traen a la mestra del rincon de bloques!
Conseguir lugar en un restaurant, puede ser una cruzada más dificil que la del desierto. Trayendo como consecuencia lugares atestados de seres casi humanos, que matan y mueren por una mesa.
Otra de las opciones, es la famosa, nos reunimos en una casa! Y entonces pizza, cerveza, empanadas y helado pasan a ser la base de nuestra dieta alimentaria del mes. Acompañada por la culpa que genera pensar que cuando todo esto termine, hay que ponerse el traje de baño de dos piezas, con todo lo que ello implica!
En fin, a lo que lleva esta seguidilla de brindis descontrolada con la gente del trabajo, del club, del barrio, familiares y conocidos es hacer que llegues a la noche buena con el estomago que ha duplicado su tamaño y el higado en tiritas y una cirrosis aguda a punto de entrar a la lista de emergencias del Incucai!
Desde el 1° de Diciembre, se comienzan a recibir las invitaciones y los mails que dicen... "Che, juntemonos a cenar... que se nos va el 2009"... Y porque??? En el 2010 nadie piensa ingerir alimentos por la noche???
Porque esta corrida de despedirse de la genge que vas a seguir viendo el primer lunes del año próximo?
Y para colmo, ahora esta Facebook. Donde además te llega la invitación de la Salita Amarilla para despedir el año, y como atracción para el evento traen a la mestra del rincon de bloques!
Conseguir lugar en un restaurant, puede ser una cruzada más dificil que la del desierto. Trayendo como consecuencia lugares atestados de seres casi humanos, que matan y mueren por una mesa.
Otra de las opciones, es la famosa, nos reunimos en una casa! Y entonces pizza, cerveza, empanadas y helado pasan a ser la base de nuestra dieta alimentaria del mes. Acompañada por la culpa que genera pensar que cuando todo esto termine, hay que ponerse el traje de baño de dos piezas, con todo lo que ello implica!
En fin, a lo que lleva esta seguidilla de brindis descontrolada con la gente del trabajo, del club, del barrio, familiares y conocidos es hacer que llegues a la noche buena con el estomago que ha duplicado su tamaño y el higado en tiritas y una cirrosis aguda a punto de entrar a la lista de emergencias del Incucai!
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